En nuestro camino desde Tarragona hasta los Picos de Europa decidimos en el último momento hacer parada en Logroño.
Estábamos entre parar en Zaragoza o en Logroño y después de escuchar varias recomendaciones sobre ésta última nos decantamos enseguida por esta opción.
Para no hacer una tirada de tantos kilómetros, nos quedamos todo un fin de semana, llegando un Sábado por la tarde hasta el Lunes por la mañana. Desde Tarragona tardamos unas 5 horas en coche haciendo un par de paradas.
Así que aquí os traigo,
QUÉ HACER UN FIN DE SEMANA EN LOGROÑO
A través de la plataforma Booking, que es la que siempre usamos para buscar alojamiento, encontramos este hotel muy céntrico, pero en una calle tranquila perfecto para ir andando a todos los sitios.
Es una ciudad media-pequeña bastante cuidada. Los edificios mantienen una misma altura sin ser muy altos, por lo que no te da ese agobio de cemento, que al menos a nosotros nos da en las ciudades más grandes.
Para visitar lo más importante lo mejor es ir andando, la ciudad tiene varias iglesias de diferentes estilos, de hecho, me dio la sensación de haber muchas para ser una ciudad pequeña.
Todas estaban abiertas hasta la noche y a todas las que entramos estaban haciendo Misa por lo que dedujimos que la religión sigue teniendo bastante peso por esta zona.
Caminamos entre callejuelas hasta llegar a uno de los puentes que cruza el río Ebro, realmente impresiona la anchura de este río y seguro que no tenía todo el caudal de agua que podría llevar.
También deciros que es ciudad de paso dentro del Camino de Santiago, se llega cruzando el Puente de Piedra y entrando por la calle Ruavieja donde encontrarás varios alojamientos para los viajeros del Camino.
Una vez visto todo lo comentado y llegar la noche, no tardamos en ir de tapeo, que ésto sí que NO te lo puedes perder.
¿DÓNDE TAPEAR EN LOGROÑO?
La zona de tapeo se divide en dos partes separadas por la Plaza de Abastos. Una de ellas es la calle San Agustín y la otra parte es la calle de San Juan, así como las pequeñas callecitas que rodean estas principales.
Todo esto es un hervidero de gentío y de bares de toneles típicos de madera en sus entradas. Lo suyo es tapear fuera del bar para estar en el meollo, y si eres de buen comer y de probar cosas nuevas habrás encontrado el paraíso.
Desde gambitas de Huelva, pulpería gallega, oreja picante, intestinos de cabrito crujientes :-P, picadillo de ensalada con tomates de los que de verdad saben a tomate, y los famosos Torreznos, una corteza de cerdo crujiente muy sabrosa que hace tiempo quería probar.
Todo acompañado de un vino, o dos…o tres…, nos quedamos muy sorprendidos de sus precios, un vino joven unos 0,80 céntimos, sí lo que oyes…un Reserva sobre 1,80 eur y un Gran Reserva o de autor no llega ni a los 3 eur.
VISITAR UNA BODEGA DE VINOS DE LA RIOJA
No podíamos desaprovechar este finde sin visitar una bodega de vinos de La Rioja, elegí las Bodegas de Ontañón que encontré por internet, a las afueras de la ciudad pero cerquita y que fuesen familiares.
Atención! para reservar lo mejor es llamar por teléfono directamente. Yo lo hice el sábado por la tarde y me devolvieron la llamada para reservar.
Los Domingos te atienden sólo por la mañana a las 12h en castellano, y media hora antes tenéis el tour también en inglés.
Tuvimos suerte de estar sólo nosotros en el tour de las 12h, y Jaime nuestro guía, nos atendió en inglés para que Evert pudiese seguir todo el tour.
Realmente os lo recomiendo y es una visita obligada si pasas por La Rioja.
¿Y SI TE PILLA LA VISITA A LOGROÑO EN UN DÍA CALUROSO?
Si te pasa como a nosotros que te pilla tu visita a Logroño en un fin de semana de julio a 37 grados, no te agobies porque también hay un plan.
Lo mejor es visitar una de las piscinas municipales de la ciudad que están pero que muy bien equipadas: el complejo polideportivo Las Norias
Está al lado del río Ebro cruzando el puente desde el centro histórico de la ciudad. Es una piscina grandísima con toboganes y flotadores, pero sin el agobio de un parque temático.
El área es muy grande rodeada de césped y si no tienes niños ni te vas a tirar por los toboganes te puedes quedar al otro lado mucho más tranquilo.
Dispone de parasoles fijos, si no llevas tu paraguas de sol, tienes vestuarios, duchas, socorristas, zona de picnic, restaurante y de juegos con niños.
Nos gustó muchísimo, se estaba muy tranquilo a pesar de que se iba llenando, pero es tan grande que siempre tienes tu espacio.
Y esto es todo para pasar un súper fin de semana en Logroño, ya ves que puedes hacer un montón de cosas tranquilamente, pero sobre todo yo me quedo con el buen comer a base de tapeo y vinos, además todo a muy buen precio, ¿ te animas? :-)
♥ Feeling Travelling